El fracaso escolar tiene un coste económico para las familias de 800 euros anuales por alumno en clases particulares a domicilio en Madrid y en empresas como http://www.masqueclases.es, sobre todo de asignaturas de Ciencias e inglés, según datos del sector.
La crisis económica parece pesar menos en la contratación de estos servicios educativos que la preocupación de los padres por el futuro de los hijos. Aun así, cerca del 30% de los muchachos de 16 años no logra el título de Secundaria Obligatoria (ESO).
Los datos confirman que nuestros estudiantes necesitan profesores de apoyo para no repetir. Pero no sólo durante el verano deben acudir a clases particulares en Madrid, o recibir esas clases particulares a domicilio; sino mantener esa ayuda y supervisión de los profesores particulares en Madrid que les permite ir sacando las materias y no sobrecargarse con asignaturas pendientes en cursos que son especialmente duros para los alumnos.
Los datos del Ministerio de Educación reflejan que los ciclos que registran mayores tasas de fracaso escolar son los primeros cursos de la ESO y los últimos de Primaria.
Los estudiantes de 5º y 6º de Primaria deben acceder a la ESO con todas las competencias básicas superadas. Muchos de los programas públicos de refuerzo que ahora se han quedado sin recursos buscaban mejorar los conocimientos de lengua y matemáticas de estos alumnos. Ahora los padres tendrán que ayudar a sus hijos en estas materias, o buscar a profesores particulares en Madrid que les impartan clases particulares a domicilio.
En las academias confirman que el sector vive un momento dulce. Muchas, que antes se dedicaban a preparar a opositores, han reenfocado su actividad al repaso escolar y las que ya nacieron con ese objetivo mantienen las mismas cifras que hace unos años o incluso evolucionan a mejor. “Es una actividad que va a más. Muchos de los alumnos acuden a nosotros tras altos índices de suspensos, aunque también hay casos de estudiantes que aprueban pero quieren mejorar sus notas.
El fracaso escolar no sólo depende del colegio, sino que los padres son en gran medida responsables de numerosos valores y hábitos que el niño adquiere durante el aprendizaje y para ayudarle deben abordar el problema de forma positiva.