Todavía no tenemos una idea clara de cómo será la educación en el futuro: sin profesores, con pizarras que se escriban automáticamente, salas con grandes recursos tecnológicos…pero lo que sí que tenemos son pequeños indicios de cómo la educación va cambiando a lo largo de los años. Ya hemos dejado atrás las horas de clase sentados en el pupitre y escuchando a nuestro profesor sin poder decir una palabra. Ahora las clases son dinámicas, tenemos actividades con nuestros compañeros y la participación y las nuevas tecnologías son parte fundamental de nuestro día a día.
Todos estos cambios, que a principio pueden asustar, no son más que la aceptación de que los modelos tradicionales de educación deben desarrollarse a medida que lo hace la sociedad. Los alumnos están rodeados de tecnología y recursos visuales, lo que hace que en clase necesiten motivación y contar con elementos que les sorprendan, a la vez de que les ayuden a aprender.
Las aplicaciones móviles pueden ser uno de esos elementos, que si bien hasta hace poco no se ha sabido cómo utilizar, pueden ayudar a que los alumnos aprendan de una manera diferente y divertida, y casi sin darse cuenta. Los profesores deben, a la vez, adaptarse a los cambios y comenzar un nuevo planteamiento de escuela, donde los alumnos y las tecnologías tengan una importancia adecuada para el desarrollo de la misma.
En MasterD tenemos en cuenta estos cambios y que el docente ya no es solo un mero transmisor de conocimientos, sino que debe acompañar al alumno durante todo el proceso ayudándose de nuevos recursos. Gracias a esto, MasterD ha desarrollado Questium, una aplicación que ayuda a sus alumnos a aprender mediante batallas tipo ‘trivial’ con sus compañeros.
¿Te animas a participar en la educación del futuro?